En la remota región de la Patagonia Azul en Argentina, un proyecto innovador está arrojando luz sobre la vida de tres especies emblemáticas de aves marinas: el pingüino de Magallanes, el cormorán imperial y el petrel gigante.
Gracias al monitoreo en vivo de la crianza de estas aves, se obtiene información vital para la protección del mar patagónico y la promoción de los invaluables valores naturales de la costa de Chubut.
El Parque Patagonia Azul, situado en Chubut, se destaca como uno de los lugares de mayor biodiversidad en el Mar Argentino.
Orcas, delfines, ballenas, lobos marinos y más de cincuenta especies de aves marinas llaman hogar a esta región.
Entre ellas, el pingüino de Magallanes, el cormorán imperial y el petrel gigante desempeñan un papel crucial en el equilibrio ecológico.
Científicos del Laboratorio de Ecología de Predadores Tope Marinos del CONICET, en colaboración con la Fundación Rewilding Argentina y el respaldo del Gobierno de la provincia de Chubut, han llevado a cabo un proyecto pionero.
Con la instalación de cámaras de video en tres islas remotas de Patagonia Azul, transmiten en vivo las actividades de incubación y crianza de estas especies, brindando una ventana única a la vida de estas aves.
Las islas Tova, Tovita y Gran Robredo, ubicadas a unos 140 kilómetros al norte de Comodoro Rivadavia, se han convertido en laboratorios naturales.
A través de la tecnología de punta, los científicos pueden estudiar el ciclo reproductivo sin perturbar a las aves.
Además, esta transmisión en vivo está disponible para el público en el canal de YouTube, permitiendo a todos disfrutar de la belleza natural de Patagonia Azul.
Las aves marinas llevan consigo pequeños dispositivos GPS que revelan sus estrategias y lugares de alimentación en el mar.
Según el Dr. Flavio Quintana, este enfoque permite comprender mejor las distintas estrategias de estas especies.
Los cormoranes prefieren áreas costeras, los pingüinos exploran sectores más alejados y los petreles realizan vuelos impresionantes.
Además, las cámaras subacuáticas proporcionan información detallada sobre las técnicas de caza y las especies de peces consumidas.
Esta iniciativa no solo amplía nuestro conocimiento sobre la biología y ecología de estas aves marinas, sino que también desempeña un papel crucial en su conservación.
Un ejemplo de cómo la tecnología brinda a los argentinos y al mundo entero la oportunidad de maravillarse con las bellezas naturales de la costa de Chubut, reforzando el compromiso con la preservación de la rica biodiversidad marina de la región.
Para más información visite la página de Patagonia Azul
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