La visita a Río Gallegos, aunque breve, nos dejó una impresión duradera en nuestro viaje hacia Ushuaia.

La combinación de su historia, su arquitectura única y su paisaje natural nos brindó una pausa enriquecedora y reflexiva.

Campanario Catedral de Río Gallegos
Campanario Catedral de Río Gallegos

Mientras continuábamos nuestro camino hacia el sur, las memorias de Río Gallegos, con sus fríos vientos y su cálida hospitalidad, se mantuvieron vivas en nuestras mentes.

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Esta localidad, capital de la provincia de Santa Cruz, se encuentra en el corazón de la Patagonia. Al llegar, lo primero que llamó nuestra atención fue la imponente Catedral, una construcción de chapa que destaca por su sencillez y belleza.

La Catedral de Río Gallegos
La Catedral de Río Gallegos

Construida a fines del siglo XIX, esta catedral fue declarada Monumento Histórico Nacional en 1985, y su estructura de chapa, típica de la arquitectura patagónica, nos transportó a una época pasada.

Nuestro paseo por la ciudad nos llevó a la Ría de Gallegos, una entrada de agua de mar que ofrece un paisaje pintoresco y sereno.

La costanera, con su barrio de alto nivel, nos brindó vistas impresionantes de las playas ventosas, donde el viento patagónico se hace sentir con fuerza.

La ría, costanera de Río Gallegos
Costanera de Río Gallegos

Las iglesias de chapa y las casas de madera, características de la zona, nos recordaron la arquitectura de finales del siglo XIX y nos ofrecieron un vistazo al pasado de esta región.

Iglesia de chapa en Río Gallegos
Iglesias de chapa

Una de las experiencias más memorables fue ver los barcos anclados en la ría.

Ría de Gallegos, una salida al mar
Ría de Gallegos, una salida al mar

Estas embarcaciones, algunas de ellas varadas y otras soportando los embates del viento, parecían contar historias de exploraciones pasadas y de la lucha constante contra los elementos naturales.

Barco varado en Río Gallegos
Embarcaciones varadas en la Ría de Gallegos

Mientras realizaba mantenimientos a nuestro esforzado motorhome, “La Querubina“, que venía con algunos problemas en la tracción delantera, no pude evitar reflexionar sobre la similitud entre mi situación y la de los barcos varados.

Ambos, mi vehículo y los barcos enfrentaban desafíos, pero también compartían una tenacidad inherente para seguir adelante.

Información de Río Gallegos para Viajeros

Para aquellos que planean visitar Río Gallegos, aquí hay algunos consejos prácticos:

  1. Clima y Vestimenta: El clima en Río Gallegos es notoriamente frío y ventoso, incluso en verano. Es esencial vestirse en capas y llevar ropa resistente al viento y al agua. Un buen abrigo, guantes y un gorro son imprescindibles.
  2. Alojamiento: La ciudad ofrece una variedad de opciones de alojamiento, desde hoteles hasta hosterías y cabañas. Es recomendable reservar con antelación, especialmente durante la temporada alta de turismo.
  3. Gastronomía: No te pierdas la oportunidad de probar la gastronomía local, que incluye deliciosos platos de cordero patagónico y pescados frescos. Hay varios restaurantes acogedores en el centro de la ciudad que ofrecen una experiencia culinaria auténtica.
  4. Puntos de Interés: Además de la catedral y la ría, otros puntos de interés incluyen el Museo Regional Padre Manuel Jesús Molina, que ofrece una visión fascinante de la historia y la cultura de la región, y el Monumento a la Prefectura Naval Argentina, que destaca la importancia de la navegación en esta zona.
  5. Actividades al Aire Libre: Para los amantes de la naturaleza, las cercanías de Río Gallegos ofrecen oportunidades para la observación de aves, caminatas y exploración de la vida silvestre. Los alrededores de la ría son particularmente populares para estas actividades.

Mi reflexión final

Las condiciones climáticas hicieron que las oportunidades para tomar fotos fueran limitadas. No obstante, las pocas imágenes que logramos capturar fueron suficientes para conservar los recuerdos de esta parada inolvidable en nuestro viaje.

Las fotografías de los barcos anclados, las iglesias de chapa y las casas de madera nos recordarán siempre la atmósfera única de Río Gallegos.

Río Gallegos no es solo una parada en el camino; es un destino en sí mismo, lleno de historia y belleza que merece ser explorado.

Cada rincón de esta ciudad patagónica ofrece una nueva perspectiva y un nuevo motivo para recordar la increíble diversidad y riqueza de la Patagonia Argentina.

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1 Comentario

  1. Efectivamente R.G: es gélido pero esto trae una ventaja, que no hay bichos como moscas porque el viento las corre ! aunque la desventaja es que probablemente también ahuyente a los turistas, al menos los latinoamericanos, pues a los gringos les gusta visitar estas latitudes. Es cuestión de gustos.

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